Cuando crecemos profesionalmente nos damos cuenta que el mercado laboral se ha vuelto más exigente y es por eso que si deseamos diferenciarnos y resaltar del resto es necesario contar con una identidad única que nos permita acercarnos a grandes oportunidades. Sin embargo, cuando ya estamos bien posicionados nos olvidamos de desarrollar nuestra empleabilidad y los factores que implica, como la marca personal.
Definir nuestra visión de vida profesional nos facilitará la proyección de una trayectoria y un plan capaz de acercarnos a una meta. De esa manera, podremos disfrutar del camino y la satisfacción de sentir que estamos en el rumbo correcto.
Mejorar nuestra empleabilidad y en este caso, desarrollar y pulir nuestra marca personal nos permitirá acceder a una posición superior a la que ya tenemos actualmente, por ende, beneficiará en un 100% ya que, nos ayudará a que destaquemos.
¿Cómo desarrollar a marca personal?
- Análisis, atributos, autenticidad
- Diferenciación
- Notoriedad
Teniendo en claro este concepto debemos empezar a realizar cambios en nuestra vida profesional.
- Debemos comenzar el proceso con el análisis de atributos, valores y fortalezas requiere de un ejercicio de autoconciencia y priorización que resulta difícil cuando no contamos con una visión sobre nuestra vida profesional que delimite nuestro campo de interés y acción. En esta etapa es clave identificar competencias blandas y atributos reales que reflejen un auténtico "yo".
- Diferenciarnos implica decidir qué atributos reales nos acercan al empleo deseado, a la empresa ideal y nos mantiene en la ruta de la trayectoria proyectada.
- Una vez definidos nuestros atributos diferenciales, es momento de elegir los canales e instrumentos que nos faciliten su promoción; sin perder de vista el segmento al cual nos dirigimos y en el cual tendremos las mayores oportunidades de éxito.
Un gran apoyo para promocionar nuestra marca personal es la construcción, consolidación y mantenimiento de redes sociales, que puede resultar difícil para algunas personas pues se encuentra estrechamente vinculado con el desarrollo de competencias interpersonales aplicadas a la tecnología. En este punto, contar con el consejo de un especialista podría ser de gran ayuda para lograr mayor efectividad.
Cabe mencionar que la marca personal nos posiciona como personas "empleables" en un determinado contexto y tiempo. Nunca será un concepto concluido y, como tal, es necesario revisarlo permanentemente a la luz de nuestro ADN, y asumir la responsabilidad de nuestro presente y futuro profesional más allá de la suerte.