Es claro que cuánta mayor información y experiencia posee un candidato, más posibilidades tiene de encontrar un empleo de mayor calidad. Pero no solamente es eso, también se da importancia a las competencias del postulante, las cuales a menudo no se reflejan en el currículum.
Para tener en claro ¿qué son las competencias?
Son factores que diferencian a una persona con un desempeño superior a las demás que tienen uno adecuado, es decir son aquellas capacidades de conocimientos, pensamientos, habilidades y destrezas, actitudes y valores en las diferentes interacciones que permiten realizar de forma óptima sus funciones laborales.
En la gestión de recursos humanos, el concepto de competencias está firmemente asentado, ya que a la hora de evaluar y medir la contribución de una persona, se toma en cuenta los factores diferenciadores de éxito, dichos factores que hacen que una persona esté más calificada para un puesto y por lo tanto estará mejor posicionada para desarrollarlo con éxito.
Los conceptos básicos que integran las competencias:
- Habilidad: Es el talento y el potencial para desarrollar alguna función y adquirir nuevos conocimientos y a su vez destrezas. Por lo tanto, la persona hábil logra alcanzar su meta específica gracias a su destreza.
- Destreza: Es el conjunto de habilidades prácticas que posee una persona para realizar acertadamente algo y en donde además se pone en juego los sentidos.
- Actitud: Es la forma en la que una persona se adapta de forma activa a su entorno y es la consecuencia de un proceso cognitivo, afectivo y conductual.
- Aptitud: La capacidad de una persona para realizar o desempeñar correctamente cierta función o actividad.
Las competencias más buscadas son:
- Pensamiento crítico: Utilizando el razonamiento y la lógica, permite facilitar la identificación de problemas y detectar oportunidades de mejora.
- Resolver problemas complejos: Las empresas buscan personas profesionales con la capacidad de resolver problemas a corto tiempo.
- Tomar decisiones acertadas: Si bien es cierto que tomar decisiones rápidas es muy útil, también es necesario ser reflexivo y analizar y evaluar las mejores opciones para tomar decisiones correctas y beneficiosas.
- Escucha activa: De esta manera favorece a que se realice una correcta comunicación sea eficaz entre los colaboradores y clientes.
- Dominio de las TIC: Se ha vuelto un requisito básico para cualquier trabajo. Las habilidades más requeridas tratan de saber navegar por Internet, el manejo de programas complejos, el manejo de redes sociales y programas básicos de oficina, por ejemplo Microsoft Office.
- Matemáticas: Por lo usual, las empresas tecnológicas requieren a colaboradores con amplios conocimientos de álgebra, geometría, cálculo, estadística, entre otros.
- Seguimiento: Las organizaciones buscan a personas que sean capaces de evaluar su propio trabajo y mantener un seguimiento de su desempeño y el de los demás.
- Ventas y marketing: A pesar de que la empresa no este enfocada en la comercialización, las habilidades comerciales son muy consideradas en el mundo laboral actual, ya que la persona que es capaz de promocionar un producto, puede venderse a sí mismo como el mejor candidato para el puesto y en un futuro ofrecer a la empresa competencias útiles.